De un mundo a otro. Correspondencia (1910-1918)

De un mundo a otro liburuaren azala
Stefan Zweig
Helduentzako ez fikzioa

En noviembre de 1914, tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, Stefan Zweig anotó en sus Diarios: «He tenido que escribir a Romain Rolland, necesitaba desahogarme con un amigo. Aquí nadie me entiende: carecen de la voluntad firme de ser justos». Y precisamente ese elevado sentido de la justicia, así como su fervorosa defensa del pacifismo y de los ideales humanistas, unió al futuro Nobel francés con su más fiel discípulo austríaco.